Un chico joven se derrite de furia en:
Slime City (1988) A.K.A Despedazator (España), A Maldição de Zachary (Brasil), The Slime (Reino Unido).
Directores: Gregory Lamberson (como Greg Lamberson)
Guión: Gregory Lamberson (como Greg Lamberson)
Reparto: Craig Sabin, Mary Huner, T.J. Merrick, Dennis Embry, Dick Biel, Jane Doniger Reibel, Bunny Levine, Marilyn Oran.
Sinopsis: Un estudiante se muda a un edifico con extraños vecinos que lo transforman en una bestia que se derrite y debe de asesinar para volver a su forma normal.
Slime City es una de esas películas que se basan en el derretimiento de sus personajes, hemos visto esto en cosas como Street Trash (1987) y The Incredible Melting Man (1977), sus efectos especiales son increiblemente buenos, puede que sean lo mejor de toda la cinta pues las actuaciones, el ritmo, la dirección y el guión tiene defectos considerables a la hora de querer ver la película. Su ritmo tan lento y poco entretenido puede volverse molesto o tedioso para cuando la acción en verdad comienza.
Esta producción de ultra bajo presupuesto cuenta con mi admiración, debido a que este filme fue hecho con la paupérrima cantidad de $50,000 que no parece nada barato si se trata de transacciones normales, pero al hacer una película de calidad mediana usualmente se necesitan unos 100,000 dólares como mínimo, es impresionante ver lo que se pudo hacer con la mitad de eso en Despedazator.
Con los años se convirtió en una obra de culto que es ligeramente conocida en el mundo del cine cutre o de terror, sus escenas grotescas de asesinatos y desmembramientos son extraordinariamente divertidas, añade a eso que se hizo con muy poco dinero y tienes una película de culto en potencia. Tiene fallos que la alejan de convertirla en una gran película independiente, sin embargo, el esfuerzo de los cineastas no ha sido en vano, Slime City cumple con lo que promete.
Reseña a Slime City (1988):
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